Jackeline Erize, del merendero “Rayo de Esperanza”, dijo que tras la tormenta nadie de la delegación se acercó para asistir a las familias.
“Hay familias que todavía tienen agua dentro de sus casas”, contó esta mañana en Radio Altos Jackeline Erize, del merendero “Rayo de Esperanza” sobre los graves problemas que generó la tormenta en Villa Caracol.
Como lo informábamos ayer en nuestro diario digital, desbordó el canal, se anegaron calles y se inundaron viviendas.
“Todo el tiempo hay problemas y situaciones como estas: mamás que se quedan sin nada porque se les moja todo”, aseveró.
Si bien indicó que el barrio es jurisdicción de la delegación Noroeste, remarcó que el delegado prácticamente no da respuestas. Y subrayó que hasta el momento nadie del Municipio se acercó para asistir a las familias afectadas por las lluvias.
Para quienes quieran colaborar con las familias a las que se les inundaron sus casas, Jackeline está juntando donaciones en su vivienda ubicada en Belisario Roldán 2620 donde también funciona el merendero “Rayo de Esperanza”. Pueden acercar colchones, frazadas, calzado y ropa tanto para niños y niñas como para adultos.
El trabajo del merendero
Jackeline también se refirió a su ayuda a vecinos y vecinas del barrio con la entrega de meriendas. Actualmente dijo que hay unas 150 familias anotadas, aunque ese número durante la pandemia era mucho mayor.
“Se acercan vecinas para ayudar y todo lo hacemos en mi casa. Según los alimentos que nos traigan es la cantidad de meriendas que podemos dar”, precisó.
Señaló que entregan leche, tortas fritas y pan casero, entre otros alimentos. “Nos manejamos de diferente manera para seguir trabajando y para que siga funcionando el merendero”, remarcó.