Recesión y caída de la actividad industrial: ¿Bahía es una isla?

Anoche publicábamos en nuestro diario digital el informe que realizó el Centro de Estudios Económicos de la Unión Industrial de Bahía Blanca entre los asociados a la institución y esta mañana en diálogo con Radio Altos, su economista en jefe, Martín Goslino, realizó un análisis del resultado de la encuesta realizada en el mes de junio para conocer la realidad del sector y la valoración de las expectativas en el mediano plazo.

“Seguimos estando en una situación por debajo de la línea de flotación, con mayor proporción de empresas que están atravesando una situación más negativa que positiva respecto al cambio de gobierno. Sobretodo se nota en la cadena de pagos y en la rentabilidad”, planteó en primer término.

De todos modos, respecto a la anterior encuesta realizada en el mes de marzo, esa situación negativa actualmente es levemente menor.

Otro de los puntos que se evalúan son las expectativas. “En marzo teníamos expectativas bastante neutras respecto a que mejorará el nivel de actividad de acá a fin de año y ahora tenemos expectativas que pasan a un plano más levemente optimistas”, remarcó.

Admitió que genera sorpresa que haya entre las y los encuestados “algún grado de optimismo” sobre un repunte de la actividad en los próximos meses o que “no esté tan afectada la masa societaria”, en un contexto nivel nacional que refleja una importante caída en los niveles de indicadores industriales.

“En Bahía no podemos decir que estamos en una isla, pero sí que la estructura industrial atempera notablemente lo que pasa en otras ciudades frente a la crisis”, enfatizó.

Respecto a las políticas en materia económica que viene implementado el gobierno de Javier Milei desde el 10 de diciembre, el 64% de las y los encuestados se pronunció a favor del déficit cero y el 43% respaldó la desregulación.

Por último, sobre el ranking de problemáticas que afectan a las empresas, señaló que en los últimos años la inflación lideraba el listado, pero ahora pasó a un segundo plano casi en igualdad con la presión fiscal. “Haber disminuido la tasa de incremento de los precios algún efecto positivo ha tenido”, afirmó.