Desde su equipo de colaboradores adelantaron que el nuevo "superministro" buscará potenciar los sectores de la energía, la agroindustria y la economía del conocimiento.
El designado ministro de Economía, Sergio Massa apuntará a profundizar “la búsqueda de consensos” con el FMI una postura que ya mostró en el Congreso cuando trabajó activamente para la aprobación del programa con el organismo, adelantaron a Télam desde su equipo de colaboradores.
Aunque Massa advirtió que recién el miércoles se terminarán de conocer los nombres, las medidas y los detalles de la reformulación del Gabinete, en su entorno ya usan una frase para referirse a lo que pretende ser una de las premisas generales de su gestión en el Palacio de Hacienda: convertir a la Argentina en una “fábrica de dólares para exportar trabajo argentino”.
La decisión del presidente Alberto Fernández de nombrarlo al frente de la cartera económica, anunciada el jueves pasado, generó entre las autoridades del FMI una demanda lógica por conseguir más información de primera mano sobre lo que ocurriría con el país que tiene la mayor deuda con el organismo, reprogramada a través de un acuerdo que fue ratificado por ley en el Congreso argentino.
Así fue que la titular del Fondo, Kristalina Georgieva, envió un mensaje por WhatsApp a un funcionario cercano al Presidente para consultar por la sorpresiva designación de Massa y sus posibles derivaciones: el integrante el Ejecutivo transmitió el mensaje al jefe de Estado, quien instruyó a su colaborador -un secretario de Estado- para que le respondiera a la directora del FMI que el nombramiento daría “mayor fortaleza política” porque se trataba de quien había sido su “escudero en la defensa del acuerdo (con el organismo) durante el debate en el Congreso”.
En la tarde del sábado, mientras Massa permanecía reunido junto a su equipo de economistas más cercanos, entre ellos el titular del Indec Marco Lavagna, el subdirector del Fondo de Garantía y Sustentabilidad del Anses Lisandro Cleri, el titular de Aduanas Guillermo Michel y el presidente del Arsat Matías Tombolini, en la quinta de Olivos repasaban detalles y anécdotas del vínculo de confianza que el jefe de Estado construyó a lo largo de los años con quien a partir del miércoles será su ministro de Economía.
Fuente: agencia Télam.