El INDEC junto a la Secretaría de Políticas Integrales sobre Drogas (Sedronar) realizaron una encuesta en hogares sobre consumo de sustancias psicoactivas legales e ilegalizadas.
El alcohol y el tabaco son las drogas más usadas por los argentinos. Casi 9 de cada 10 de quienes toman psicofármacos van a buscarlos a la farmacia con prescripción médica. La edad promedio de inicio de consumo de cocaína es de 21 años.
Estos son algunos de los datos más relevantes que devuelve la extensa encuesta que este jueves publicará el Gobierno nacional después de un relevamiento en más de 40 mil hogares de centros urbanos del país, hecho durante 2022 en conjunto por el INDEC y la Secretaría de Políticas Integrales sobre Drogas (Sedronar), en personas de entre 16 y 75 años.
La franja etaria es novedosa ya que hasta ahora todas las encuestas oficiales hechas por este organismo en los años anteriores abordaban ciudadanos de hasta 65 años. El cambio en la metodología incluye adultos mayores, lo que muestra el crecimiento de la expectativa de vida y la extensión de la cotidianidad activa, pero impide comparar con exactitud los nuevos datos respecto de los de años anteriores.
Además de los patrones de uso, los expertos que participaron del estudio indagaron sobre la postura de los consumidores frente al ofrecimiento de drogas, la percepción del riesgo respecto de las diferentes sustancias, y las prácticas de cuidado que eventualmente toman.
Alcohol (66,2%), tabaco (25,6%), marihuana (13,8%), tranquilizantes (6,9%) y cocaína (0,6%) son, en ese orden, las drogas legales e ilegalizadas -en el caso del cannabis la situación es ambigua- más consumidas por los cerca de 30 mil argentinos que eligieron responder la encuesta en 31 centros urbanos del país.
Según explicaron fuentes que trabajaron en la encuesta a Infobae, las drogas sintéticas (MDMA, LSD), los hongos alucinógenos (psilocibina) y la pasta base (”paco”) ocupan una porción muy baja del total de la torta (menos del 0,5%) por eso no fueron destacadas particularmente en este estudio. “No quiere decir que no se midan, pero hacemos abordajes puntuales, especialmente con el paco”, explicaron.
Infobae.