Arroyo alertó sobre las consecuencias del ajuste: “Costo social brutal”

En la previa del discurso que brindará Javier Milei con el que dará inicio al período de sesiones ordinarias, el diputado nacional Daniel Arroyo dijo que espera que prime la racionalidad y que el presidente defina los ejes de su gestión y el camino que emprenderá en los próximos meses.

“Debería definir para dónde va, dar a conocer las cinco o siete leyes que digan para dónde va. Aspiro a que al final los legisladores y todos los argentinos tengamos claro qué prioriza”, manifestó en diálogo con Frente a Cano.

Al ser consultado sobre la inflación, explicó que el gobierno nacional apunta a una recesión, a un parate en la actividad económica, con caída del empleo y del consumo, para que así se estabilicen los precios. “Pero eso deja a dos tercios de la población afuera”, aseveró.

En cuanto a ese esquema que aplica el Ejecutivo para estabilizar los precios, remarcó, tiene que ver con el no consumo: “No se vende y se acomodan los precios”.

“La baja de inflación que genera el gobierno tiene que ver con que hay un parate de la actividad económica. Ha generado un mecanismo para ponerle un freno a la economía”, enfatizó.

Y alertó que se trata de un mecanismo “a lo bestia”, con un ajuste fuertísimo. “Cumple las metas ajustando a la económica. Posiblemente genere que se estabilicen los precios, pero con un costo social brutal”, planteó.

Entre las medidas de ajuste mencionó el recorte en la entrega de alimentos a comedores comunitarios. Aseguró que en enero el gobierno de Milei no envió un solo peso a los comedores y que en febrero avanzó en convenios con Cáritas e iglesias evangélicas para que lleguen los alimentos a los comedores.

Arroyo, quien impulsó cuando era ministro de Desarrollo Social la implementación de la Tarjeta Alimentar, precisó que hay cerca de 40 mil comedores en todo el país y alrededor de 10 mil están abiertos todos los días.