YPF acaba de crear “Argentina GNL”, la empresa bajo la cual llevará adelante al megaproyecto para levantar una planta de gas natural licuado en Río Negro. La constitución de la sociedad anónima, cuyo objeto es realizar por sí o asociada a terceros proyectos de GNL, fue publicada en el Boletín Oficial.
La nueva compañía podrá construir o contratar instalaciones de licuefacción; la infraestructura necesaria para el transporte de gas o la contratación de capacidad de transporte para asegurarse el suministro de gas necesario para los proyectos; prestación de servicios de licuefacción a terceros; la compra de gas y la comercialización de GNL; la compra de terrenos, pedido de permisos y concesiones para el proyecto.
Además, para hacer todas esas operaciones Argentina GNL podrá “celebrar todo tipo de contratos y realizar operaciones financieras en general, project finance, préstamos, otorgar avales, fianzas y/o toda clase de garantías reales o personales, realizar aportes de capital a empresas y/o financiación de cualquier tipo a personas jurídicas”, indica el documento de constitución de la empresa.
La empresa arranca con un capital social de $ 30 millones, representado en 30 millones de acciones ordinarias de $ 1 de valor nominal que fueron suscriptas por YPF. El directorio estará compuesto por Gustavo Ernesto Di Luzio (presidente) y Pablo Gasparutti (vice).
YPF había comenzado el proyecto de GNL junto a Petronas. La firma propiedad del Estado de Malasia iba a asociarse con la estatal, pero ahora estaría por retirarse.
Entre las posibles candidatas internacionales que pisan fuerte en el negocio del GNL y podrían reemplazar a Petronas están la angloholandesa Shell, las estadounidenses ExxonMobil, Chevron o la francesa TotalEnergies. El jefe de Gabinete Guillermo Francos había dicho que era inminente la firma de un acuerdo.
El proyecto para que la Argentina sea uno de los grandes jugadores mundiales en las exportaciones de GNL demandaría inversiones por entre 30.000 millones de dólares y US$ 50.000 millones en un plazo no menor a 6 o 7 años.
Fuente: diario Clarín