La mayor parte del cohete Larga Marcha-5B se consumió al entrar en la atmósfera a las 12:55 a.m., informó la Agencia Espacial China.
El anuncio no dio detalles sobre si los trozos cayeron sobre tierra o mar pero afirmó que “la zona de aterrizaje” era de 119 grados longitud este y 9,1 grados latitud norte. Eso está en aguas al sudeste de la ciudad filipina de Puerto Princesa, en la isla de Palawan.
De momento las autoridades filipinas no han dicho si alguien en tierra resultó afectado.
China ha sido criticada antes por dejar que partes de sus cohetes caigan a tierra sin control. La NASA acusó a Beijing el año pasado de “no cumplir con los estándares responsables en cuanto a los restos de sus naves espaciales” luego que trozos de un cohete cayeron en el océano Índico.
La primera estación espacial china, la Tiangong-1, cayó en el océano Pacífico en el 2016 y Beijing confirmó que perdió el control. Un cohete de 18 toneladas cayó descontrolado en mayo de 2020.
China también fue criticada por usar un misil para destruir uno de sus satélites climatológicos en el 2007, creando una nube de escombros que según otros gobiernos podría perjudicar a otros satélites.
El 24 de julio China lanzó el cohete Larga Marcha-5B, su cohete más potente hasta la fecha, con el que llevó a órbita el laboratorio Wentian. El lunes el laboratorio fue acoplado al módulo Tianhe, donde viven tres astronautas.
Los restos de otra nave de carga que llevó material a la estación espacial cayeron a una zona del Pacífico luego que la mayor parte se desintegró en su reingreso a la atmósfera, anunció antes el gobierno.
Fuente: Associated Press.