El economista Francisco Cantamutto puso una serie de reparos a la estabilidad del dólar que el gobierno de Javier Milei presenta como un éxito de su política económica.
En diálogo con Radio Altos, enfatizó que esa estabilidad del último mes y medio de la moneda extranjera se logró gracias al blanqueo de capitales en marcha, mecanismos que tildó de “aberración jurídica”.
“Es una condonación masiva a gente que evadió, eludió, que pagó menos impuestos y que ahora tiene la oportunidad de blanquear los fondos. Es una aberración que hace que sectores poderosos o gente que puso plata fuera del sistema ahora la pueda ingresar con menos impuestos y una vez introducida ni siquiera se la retienen”, criticó.
Recordó que alianzas internacionales de lucha contra el narcotráfico y el lavado de dinero se han pronunciado fuertemente en contra de medidas como el blanqueo que dispuso la gestión de Milei porque quien opta por el beneficio no tiene que brindar ningún tipo de explicación sobre el origen de ese dinero.
Los fondos que ingresaron hasta el momento por el blanqueo ya comenzaron a ser retirados por sus dueños. Cantamutto señaló que el dinero se deposita en una cuenta y una parte es destinada al Banco Central como un encaje de liquidez. “Eso engrosó las reservas, pero desde esta semana esos depósitos que tenían que estar parados ahí durante un tiempo, ya se pueden empezar a retirar. Y el saldo neto de esta semana es que empezaron a retirarse los depósitos, es decir, que la gente que blanqueó, que puso la plata en esos depósitos que engrosaron las reservas momentáneamente, ya los están retirando”, aseveró.
Y agregó que el destino de ese dinero está siendo nuevamente “el colchón” y que no se está invirtiendo en actividades productivas como había anunciado el gobierno. “No lo están poniendo en ningún lado, o sea, no va a tener impacto real”, insistió.
En la continuidad de su análisis planteó que el Fondo Monetario Internacional aprobará la próxima revisión del acuerdo con Argentina y le ingresarán, de este modo, más de mil millones de dólares al gobierno que, subrayó, “lo van a ayudar a patear la pelota un poquitito más”.
Cantamutto, docente de la UNS, también se refirió al conflicto en el ámbito universitario y recalcó que el sistema así no puede seguir funcionando. A modo de ejemplo dijo que hay docentes a cargo de un curso con más de 100 estudiantes que cobran de bolsillo un sueldo de 140.000 pesos al mes.
En cuanto al reclamo del gobierno nacional de que las casas de altos estudios permitan ser auditadas, remarcó que la UNS tiene sus cuentas públicas y aseguró que la transparencia es absoluta.
Opinó que detrás del ataque el Ejecutivo nacional al sistema universitario está el objetivo de deteriorar la calidad de la educación: “No veo que la universidad vaya a cerrar en breve, lo que están haciendo es deteriorarla de tal manera que todo aquel que pueda pagar elija irse a una universidad que quizás no tenga el mismo nivel, pero pagando tendrá un título”.