Contra las políticas de Trump, “comienza a vertebrarse un eje Brasil-México”

La deportación de 158 brasileños por parte del gobierno de Estados Unidos ha generado una crisis con el gobierno de Lula Da Silva. Hoy el presidente de Brasil se reunirá con el canciller Mauro Vieira para definir los pasos a seguir.

El periodista bahiense que vive en Brasilia, Darío Pignotti, confirmó que el avión proveniente de Estados Unidos aterrizó en la selva, en la ciudad de Manaos, con 158 personas, que según describieron, fue como estar en “un campo de concentración en el aire” porque fueron maltratados y estuvieron con las manos esposadas y con cadenas en los pies.

El Ministerio de Relaciones Exteriores ya anticipó que Brasil va a estar representado en la reunión de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), convocada por su presidenta, Xiomara Castro (jefa de Estado de Honduras), que se desarrollará el próximo viernes.

Señaló que el canciller Vieira, a quien describió como un diplomático de carrera muy avezado, calificó como inaceptable el trato al que fueron sometidos los 158 brasileños.

Además, indicó que la Policía Federal realizó con sus peritos y médicos un relevamiento de las heridas sufridas por hombres, mujeres e incluso algunos niños, en el avión que los trajo desde EE.UU hasta la selva amazónica.

“Este tema desata una crisis entre Brasil y Estados Unidos, cuando el gobierno de Donald Trump acaba de cumplir una semana este lunes”, aseveró.

Y agregó que estas primeras deportaciones masivas han generó un corrimiento de Brasil hacia el eje que están conformando México y Colombia, del que se distancia Argentina.

“Brasil y México que durante décadas han llevado adelante sus políticas externas de espaldas unos a otros, comienzan a aproximarse y a distanciarse drásticamente de Argentina”, enfatizó.

“Comienza a vertebrarse un eje Brasil-México con el apoyo creciente de otros países de la región importantes como Colombia”, resumió.

En la vereda opuesta al gobierno de Lula, está el exmandatario Jair Bolsonaro destacó la medida adoptada por Trump de deportar a brasileños. “Es algo que no solamente lo diferencia de Lula, sino que sorprende viniendo de boca de un militar que no hace otra cosa que proclamarse como nacionalista”, remarcó.