Autoridades de Beijing informaron este martes que ya no será necesaria la presentación de test negativos de coronavirus para ingresar en supermercados, centros comerciales y oficinas estatales, en un nuevo paso de China para flexibilizar sus estrictas medidas de “Covid-cero” tras la ola de protestas contra las restricciones registrada en varios puntos del país.
Así lo indicó el gobierno municipal de la capital de China en un comunicado, mientras las autoridades sanitarias insisten en que la variante Ómicron del coronavirus, la que prevalece en China, tiene una virulencia mucho más débil y que la mayoría de los contagios en curso, que llegaron a cifras diarias récord, son leves o asintomáticos.
La decisión llegó un día después de que Beijing y por lo menos otras 16 grandes ciudades de China dejaran de exigir un test negativo de coronavirus hecho dentro de las 48 horas anteriores para usar el transporte público, días después de que las autoridades y la prensa chinas, en un fuerte giro, empezaran a rebajar el tono alarmista sobre el curso del brote.
Una de las ciudades que dejó de pedir test en el transporte público es Zhengzhou, sede de la mayor fábrica de iPhones en el mundo, donde además la gente, como en Beijing, también puede acceder a sitios públicos e ingresar a edificios residenciales sin necesidad de una prueba de Covid de 48 horas.
Las nuevas medidas fueron implementadas ante los reclamos surgidos entre la población contra la estricta política de “Covid-cero” del Gobierno chino del presidente Xi Jinping, que aunque permitió neutralizar la diseminación del virus trajo enormes costos económicos al país y creciente hartazgo entre los ciudadanos.
Los test negativos tampoco serán necesarios para trasladarse entre varias localidades.
Este tipo de prueba en masa fue esencial para el gigante asiático a la hora de rastrear los contactos de Covid-19 durante la pandemia.
Mejorar el testeo
Por ello, algunos recintos de Beijing seguirán manteniendo esta medida, como cafeterías, bares, karaokes, hospitales y guarderías, entre otros.
Las autoridades locales dijeron asimismo que los diferentes barrios capitalinos deberán mejorar el servicio de test e insistieron en la importancia de utilizar barbijos y reducir los contactos, informó la agencia de noticias AFP.
Pese a la flexibilización dispuesta hace varios días por las autoridades, y que este martes y el lunes cobró más fuerza con anuncios concretos, estudiantes chinos de la Universidad Tecnológica de Nanjing, en la provincia oriental de Jiangsu, realizaron una protesta contra un confinamiento por cornavirus impuesto en esa casa de estudios.
La protesta tuvo lugar el lunes por la noche después de que la universidad anunciara que cerraría las instalaciones por cinco días tras detectar un caso de coronavirus.
En redes sociales circulaban videos de jóvenes exigiendo poder abandonar los establecimientos de la universidad.
La manifestación pareció ser mucho menor que otras sin precedentes que tuvieron lugar la semana pasada en Beijing y muchas otras ciudades de China en contra de meses de restricciones por el coronavirus en la última gran economía del mundo que aplica controles tan estrictos.
Algunos manifestantes fueron vistos exigiendo la renuncia de Xi, en videos grabados en las protestas y que circularon en las redes sociales. Las manifestaciones fueron reprimidas y hubo detenidos, dijeron testigos y mostraron los videos, pero las autoridades no dieron información al respecto.
Estados Unidos, entre otros países, y la ONU, criticaron la represión de las protestas.
El lunes último, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, dijo que su país tiene interés en que China controle la pandemia de Covid-19 “por el pueblo chino ante todo, pero también por las personas de todo el mundo, queremos que tengan éxito”.
El jefe de la diplomacia estadounidense destacó “la dramática consecuencia” mundial de las desaceleraciones que han afectado a la economía china, la segunda detrás de Estados Unidos, provocadas por las drásticas restricciones impuestas por Beijing.
Algunos expertos advierten de riesgos asociados con una eventual reapertura debido a las deficiencias del sistema de vacunación en China, pues la prioridad de las autoridades se centró más en aislar a los infectados.
China acumula unos 1,7 millones de casos de coronavirus e informó este martes 28.062 casos en las últimas 24 horas, la mayoría asintomáticos, por debajo del récord de más de 40.000 que había marcado la semana pasada.
El país acumula 5.235 muertes por coronavirus, una cifra muy baja comparada con la de otras naciones.
El Covid, que mató a más de 6 millones de personas en todo el mundo, se detectó por primera vez en China a finales de 2019, en la ciudad central de Wuhan.
Fuente: agencia Télam