UATRE se encuentra en estado de alerta y movilización. “Al peón rural no le alcanza la plaza para llenar la olla”, advirtió Ariel Piangatelli.
La Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE) se encuentra en estado de alerta y movilización luego del fracaso de la tercera reunión paritaria.
La última oferta de las entidades rurales que integran la denominada Mesa de Enlace fue de 0% de aumento en junio, 1% en julio y 1% en agosto, más una suma no remunerativa 6.000 pesos en julio y agosto. Desde el gremio tildaron de insuficiente la oferta.
“Lamentablemente nos retiramos de la reunión, no hay posibilidad de tener ningún tipo de discusión manejándonos en estos números”, afirmó esta mañana en diálogo con Radio Altos Ariel Piangatelli, secretario general de UATRE Bahía Blanca.
Indicó que en la actualidad un peón percibe de bolsillo 650.000 pesos. Sobre el trabajo que realiza, detalló que se encarga de todas las tareas diarias de un campo, cumpliendo, según marca la Ley de Trabajo Agrario, 44 horas semanales. En caso de superar esa cantidad de horas trabajadas, debe cobrar hora extra. Sin embargo, aseveró que en muchos casos no se cumple.
“Sabemos que la naturaleza de la actividad requiere que nos tengamos que quedar, pero eso se remunera, eso se paga como hora extra. Lamentablemente parecería que en el ámbito rural atrasamos 100 años”, se quejó.
En cuanto a la vivienda, explicó que los empleadores deciden ofrecerles a sus trabajadores casa por una cuestión de logística, teniendo en cuenta las distancias, sumado a que también les permite tener un cuidador en sus campos.
Un punto en el que hizo principal hincapié es el “trabajo en negro”. “Hay entre 60% y 70% de trabajo no registrado en el ámbito rural”, advirtió.
Contó que en el primer semestre de 2025, UATRE realizó más de 4.000 inspecciones en campos de todo el país: “Lo que vemos es mucho trabajo sin registrar, mucha falta de condiciones básicas, falta de ropa de trabajo, incumplimiento de horario y del franco semanal”.
Sin posibilidad de avanzar en un acuerdo paritario, el gremio se encuentra en estado de alerta y movilización. “Pedimos el apoyo del movimiento obrero en su conjunto para poder revertir estas situaciones en que nuestros trabajadores a través de su esfuerzo no pueden llenar la olla, lamentablemente no le pueden dar de comer a su familia. Estamos teniendo cada vez más trabajadores rurales que se acercan al sindicato a buscar un refuerzo alimentario porque no llegan a fin de mes”, expuso, por último.