Esta mañana en su participación como panelista en Radio Altos, el abogado y profesor universitario Federico Storani se refirió a la figura de Donald Trump. La pregunta que disparó su análisis fue ¿cómo se le pone un límite al presidente de Estados Unidos?
Admitió que la respuesta a ese interrogante es difícil porque se trata del mandatario de la primera potencia del mundo y de la mayor potencia militar del mundo.
“Hay que ponerle límites porque el mecanismo que corresponde es el derecho internacional y él se lo pasa por donde quiere porque permanentemente usa la fuerza y aplica su propia doctrina aun burlándose de esas mismas normas que él proclama en otros casos, es decir, con una doble vara”, expresó.
Resumió que Donald Trump es la expresión más prepotente de una potencia que está en proceso de decadencia porque Estados Unidos, si bien mantiene la supremacía militar por sobre el resto de las naciones, no se encuentra en la misma posición que tras la Segunda Guerra Mundial desde el punto de vista económico. “Ha ido perdiendo influencia. Hay que temerle a los imperios cuando están en ascenso porque se hacen expansionistas y muy agresivos, pero también cuando están en descenso porque se hacen extremadamente peligrosos y tiran manotazos”, remarcó.
En ese sentido, opinó que actualmente la gestión de Trump está dando manotazos, por ejemplo, con los ataques a embarcaciones en el Caribe que considera que son utilizadas por narcotraficantes para transportar droga.
“Ha tomado la decisión sobre la vida y la muerte de personas sin saber si realmente son culpables. Ya ha producido el hundimiento de una cantidad importante de lanchas y no sabe si sus tripulantes estaban involucrados con el negocio del narcotráfico. Él decide sobre la vida y la muerte, y no tiene ningún proceso previo, ningún juicio previo”, criticó.
Sostuvo que ese accionar es una excusa porque de ninguna manera frenará el avance del narcotráfico a nivel internacional. Y sumó que Estados Unidos tiene un gravísimo problema porque “es el consumidor principal de todo tipo de drogas, incluso de las que se fabrican en su propio país. Por lo tanto se convierte en un mercado sumamente apetecible para cualquier banda de narcotraficantes”, planteó.
Storani agregó a su análisis que Trump puso énfasis en su presunta lucha contra el narcotráfico en la zona del Caribe, fundamentalmente amenazando la soberanía de Venezuela y lo peligroso de eso es que puede producir un efecto cascada: “Amenaza a Venezuela con la posibilidad de una intervención. Hasta ahora es un bloqueo marítimo y el cierre del espacio aéreo, pero si llegara a ir un paso más allá, va a involucrar necesariamente también a Colombia y entonces aquel valor que nosotros siempre exhibimos como algo muy positivo para nuestro continente, que es un continente de paz, que no tiene conflictos bélicos, desaparecerá”.
“De lo que se trata no solamente es del dominio geopolítico, sino del aprovechamiento y la apropiación de los recursos”, subrayó y mencionó a las famosas tierras raras que sirven para la fabricación de las últimas tecnologías, son aquellas que se están disputando con la República Popular China. “Hoy estamos viendo un escenario que reproduce la lógica de la Guerra Fría, pero con otros actores: la República Popular China, por un lado, que muy sigilosamente consolida su poder y su avance, y, por otro lado, Estados Unidos de Norteamérica, que está perdiendo de a poco esa carrera, y eso lo hace tomar actitudes cada vez más desesperadas”.