El descubrimiento de los sospechosos del robo de las joyas de la corona en el Museo del Louvre progresa. Cinco personas fueron detenidas el miércoles a la noche por la policía en diferentes operativos en París y sus suburbios.
Uno de ellos es el conductor del vehículo que los ayudó a fugarse. Otro es miembro del comando que participó en el robo el domingo a las 9 y media de la mañana en el museo.
Uno de los cinco detenidos “era, de hecho, uno de los objetivos de los investigadores. Lo teníamos en la mira”, declaró la fiscal Laure Beccuau este jueves por la mañana. “Existen pruebas de ADN que lo vinculan, desde nuestro punto de vista, con el robo”, aclaró.
“Los otros cuatro hombres podrán aportar información sobre cómo se desarrollaron los hechos”, explicó la magistrada.
Pero las joyas siguen sin aparecer. Podrían haber sido entregadas “ a otro miembro de la banda”, según la fiscal Laure Beccaud.
“Los allanamientos no dieron con el botín” dijo. “Las ocho joyas de la corona francesa robadas siguen desaparecidas. Los allanamientos realizados durante la noche no dieron con el botín”, lamentó la fiscal de París, al tiempo que subrayó que “la investigación avanza” con cada allanamiento e interrogatorio.
“Poco a poco, la investigación se estrecha y continúa identificando a todos los implicados”, afirmó.
Discreción
La fiscal y los 100 policías que investigan el robo son discretos y no quieren dar información que perjudique a la información o de pistas a los que esconden las joyas. Pero recuerdan que quien las compre, también comete un delito y llama a no fundirlas.
Esta vez los barrios fueron diferentes y más elegantes a la hora de las detenciones. Los allanamientos se llevaron adelante a las 8 de la noche en el distrito XVI de Paris, donde tienen su domicilio, embajadas, diplomáticos y extranjeros de Oriente Medio. También en Aubervilleiers y Saint Denis.
Los cinco sospechosos están siendo interrogados por la policía.
Laure Beccuau, fiscal de París, confirmó el jueves por la mañana las detenciones, aunque sin especificar el número. Afirmó que las joyas aún no han sido recuperadas.
En una conferencia de prensa, Beccuau declaró que los hombres serían procesados “por robo agravado”. Este delito conlleva una pena máxima de 15 años de prisión.
Beccuau declaró que se cree que los sospechosos detenidos son los ladrones que entraron en la galería, a las 9:34 de la mañana del 19 de octubre. Más una persona más que no identificó.
Quiénes son los sospechosos
Uno de ellos es un argelino desempleado, de 34 años, que reside en Francia desde 2010. Tiene antecedentes penales relativamente leves, que incluyen infracciones de tráfico y un caso de hurto. Beccuau afirmó que fue identificado por agentes forenses, que hallaron su ADN en una de las motocicletas utilizadas para la fuga. Fue arrestado en el aeropuerto Charles de Gaulle el sábado, cuando se disponía a volar a Argelia.
El segundo sospechoso es un ciudadano francés de 39 años, quien declaró a los investigadores que se ganaba la vida como taxista no oficial. Tiene antecedentes penales por robo agravado, incluyendo el de embestir con un coche un cajero automático. Está a la espera de juicio por otro caso de robo agravado el próximo mes. Fue arrestado cerca de su domicilio, el sábado, en Aubervilleiers en Saint t Denis. Fue identificado mediante una muestra de ADN, hallada en una de las vitrinas de la Galería de Apolo.
Beccuau declaró que ambos hombres habían admitido parcialmente su participación, pero se negó a dar más detalles.
Los ladrones se llevaron un collar que Napoleón Bonaparte regaló a María Luisa de Austria, su segunda esposa; la tiara, el collar y los pendientes de la reina Hortensia, su hijastra; y una diadema, un broche de diamantes en forma de lazo y un broche relicario , que pertenecieron a la emperatriz Eugenia, esposa de Napoleón III, sobrino de Bonaparte, quien gobernó Francia durante 22 años, a mediados del siglo XIX.
Beccuau afirmó que no se había recuperado ninguna pieza, pero añadió: “Mantengo la esperanza de que aparezcan”.
Fuente: diario Clarín