Este viernes se concretó un nuevo proceso de destrucción de armas secuestradas.
Se trata de 323 materiales que se encontraban secuestrados en la Sala de Efectos del Ministerio Público Fiscal del Departamento Judicial de Bahía Blanca.
La tarea consistió en realizar el retiro del material por parte de personal de la Dirección de Logística del Servicio Penitenciario Bonaerense, para luego trasladarlo al RENAR ( Registro Nacional de Armas) y así proceder a su destrucción o disposición final.

Dentro del material seleccionado se encuentran revólveres, escopetas, pistolas, pistolones, fusiles y elementos de cartuchería.
Según explicaron desde Fiscalía General para llevar a cabo esta tarea, se conformó una comisión especial de trabajadores de la justicia quienes analizaron de manera minuciosa y durante varios meses, la situación de aquellas armas que se encontraban en condiciones legales de ser destruidas, su numeración y confeccionaron planillas detalladas con toda esa información.
