El pasado lunes cuando se desarrolló la reunión de la comisión de usuarios testigos en el Concejo Deliberante los representantes de las empresas y del gremio de la UTA expusieron el atraso en el cuadro tarifario.
El último aumento se registró en el mes de septiembre cuando la tarifa plana pasó a costar $895.
Esta mañana en diálogo con Radio Altos el secretario adjunto del sindicato, Roberto Ponce, detalló que el último estudio de costos se realizó en el mes de noviembre y arrojó $1050.
“Con ese valor más la ayuda que viene dando el estado municipal de $130 por pasaje se le daría aire a las empresas”, aseveró.
De todos modos, aclaró que desde noviembre hubo aumentos de sueldos, de combustible y de insumos, por lo tanto, si se efectúa un nuevo estudio de costos, el valor será mayor que esos $1050.
Remarcó que en el encuentro de la comisión de usuarios testigos dejaron en claro tanto desde las prestatarias como desde el sindicato la necesidad de readecuar el cuadro tarifario para que las empresas no sigan desfinanciándose.
En tal sentido, alertó sobre ese desfinanciamiento que vienen teniendo en los últimos años las firmas a cargo del transporte público de la ciudad. A modo de ejemplo, detalló el caso de San Gabriel: “Trajo 90 colectivos 0km en 2012 y hoy tiene al 70 u 80% de sus colectivos de ese modelo. Está a la vista que se ha desfinanciado la empresa y eso más el sostenimiento de modelos viejos, hace que la compañía hoy tenga mayores costos”.
Y sumó como agravante el no sinceramiento de las tarifas. “Venimos con una tarifa atrasada desde hace tres meses. Lamentablemente no hay tarifa ni compensación por esos atrasos”, subrayó.
Al ser consultado sobre el proceso que se iniciará a la brevedad de análisis de la renovación de las concesiones de las líneas que se vence en junio próximo, afirmó que desde la UTA siempre apuestan a las empresas locales, pero insistió en que se debe trabajar mucho para revertir el “gran desfinanciamiento” de las firmas.
“Apostamos a que en esta concesión se logre una estabilidad de las empresas para poder sostener al transporte. Uno quiere tener un servicio de elite como se lo merece cada pasajero, pero lamentablemente todo eso se llama costo”, planteó, por último.