La Cámara Federal, con el voto de Roberto Amabile, consideró que "existe una duda razonable sobre su imparcialidad"
La Cámara Federal de Bahía Blanca apartó al juez federal Walter López da Silva de la investigación sobre el empresario Gustavo Elías tras concluir que existe una “duda razonable” sobre su imparcialidad. ¿Por qué? Porque cajoneó la pesquisa durante meses, la remitió a Buenos Aires cuando no debía y colocó a la vista de los acusados las medidas de prueba que la Fiscalía había pedido contra ellos, con allanamientos y escuchas telefónicas incluidas.
Con el voto único de Roberto Amabile -por tratarse originariamente de una cuestión de competencia- la Cámara Federal remarcó que el 10 de mayo de 2023, el fiscal Gabriel González Da Silva planteó que el expediente debía remitirse a Buenos Aires, pero pidió que antes se ordenaran de manera urgente allanamientos, intervenciones telefónicas y otras medidas de prueba que debían mantenerse bajo total reserva para que dieran resultados.
Eso, sin embargo, no ocurrió. Recién trece meses y nueve días después, el 19 de junio de este año, el juez López da Silva ordenó la reserva del dictamen de la Fiscalía para, sólo tres semanas después, declararse incompetente, ordenar su remisión a Buenos Aires e incorporar una copia de ese dictamen al sistema informático, “quedando a la vista de todas las partes”, remarcó la Cámara al apartarlo. “A punto tal que la defensa en oportunidad de recurrir ante esta Alzada, en ejercicio de sus derechos, argumentó sobre todas y cada una de las medidas de investigación propuestas por el Ministerio Público Fiscal”.
Para la Cámara, la consecuencia lógica de la actuación del juez es evidente: “Si existía alguna posibilidad de éxito en tales diligencias, luego de haber demorado más de un año en su providencia, al haberle dado publicidad, a pesar del secreto de sumario peticionado por el Señor Fiscal, la misma se torna prácticamente nula. Frustrando, en todo o en parte, cualquier posibilidad de corroborar los extremos señalados en el dictamen fiscal aludido”.
En su dictamen de 2023, el fiscal general adjunto de la Procuración General de la Nación, Gabriel González Da Silva, había considerado que existen indicios y pruebas suficientes para sospechar que Gustavo Fabián Elías desarrolló un emporio junto a Gustavo Manuel Damiani y Maximiliano Di Federico que se cimentó en un entramado de facturas truchas, sociedades fantasma, prestanombres y operaciones simuladas o inconsistentes que le permitieron multiplicar su patrimonio de manera injustificada.
En el fallo se concluye además que la investigación debe continuar en Bahía Blanca. “No puede perderse de vista que, desde el inicio de la causa, la investigación se ha radicado y desarrollado en esta jurisdicción, con motivo de ser el lugar de principal asiento de negocios y el centro de vida de los sujetos investigados”, remarcó el camarista Amabile. “Siendo irrelevante, para contrarrestar dicha situación, las valoraciones señaladas por el juez de grado respecto de cuestiones meramente formales, como el lugar en el que se encuentran fijados determinados domicilios fiscales o el origen de las líneas telefónicas de algunas personas físicas y jurídicas investigadas”.
La investigación penal, en tanto, que comenzó a finales de 2015 con una presentación de la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac en tiempos de la Procuradora Gils Carbó y de la pesquisa encabezada desde Bahía por el fiscal Alejandro Cantaro ) pasará ahora a las manos de otro juez de primera instancia, pero, según estimó la propia Cámara Federal de Bahía Blanca, herida de muerte.
Fuente: La Nación (Alconada Mon)