La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador convocó a un paro nacional “inmediato e indefinido”.
La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), la principal del país, resolvió convocar a un paro nacional “inmediato e indefinido” en rechazo a la eliminación del subsidio al diésel, decretado el pasado 12 de septiembre por el presidente Daniel Noboa.
El presidente de la Conaie, Marlon Vargas, informó la decisión en una rueda de prensa en la ciudad andina de Riobamba, en la provincia de Chimborazo (centro), donde se realizó una asamblea extraordinaria de la organización indígena para definir acciones de hecho frente a la política económica del Gobierno.
“Hemos analizado profundamente, minuciosamente, y hemos resuelto (…) convocar a las bases, a las organizaciones sociales y la sociedad civil al paro nacional de carácter inmediato e indefinido en Ecuador”, comentó Vargas.
El líder de la Conaie leyó además otras medidas adoptadas en la Asamblea, que, según dijo, ratificó la unidad firme de los pueblos y nacionalidades indígenas, organizaciones de base y sectores sociales aliados “para enfrentar colectivamente el ajuste económico que golpea a los más pobres del país”.
Además, la Conaie denunció y rechazó supuestas amenazas y persecución por parte del Gobierno y anunció que decidió acogerse al “derecho a la resistencia”, a la vez que llamó a organismos internacionales a permanecer vigilantes.
Otras de las resoluciones anunciadas fueron declarar “estado de excepción comunitaria” en los pueblos y nacionalidades, y prohibir el ingreso de la fuerza pública a los territorios, de acuerdo con un informe de la agencia de noticias Xinhua.
El movimiento indígena ya lideró violentas y masivas protestas en 2019 y 2022, cuando los entonces presidentes Lenín Moreno (2017-2021) y Guillermo Lasso (2021-2023) intentaron sin éxito eliminar los subsidios a los combustibles.
Mientras tanto, Noboa, que el año pasado ya eliminó el subsidio a las gasolinas Extra y Eco País, las de mayor consumo en el país, ha defendido la decisión respecto al diésel señalando que el subsidio no beneficiaba realmente a quienes lo necesitan.
La eliminación del subsidio al diésel derivó en un incremento del precio del carburante de 1,80 a 2,80 dólares por galón, desde el pasado 13 de septiembre en las estaciones de servicio.
La medida, que según el Gobierno permitirá un ahorro al Estado de 1.100 millones de dólares anuales que se redireccionarán a compensaciones sociales e incentivos productivos, provocó esta semana protestas de transportistas.
La situación llevó al presidente Daniel Noboa, a decretar estado de excepción por 60 días “por grave conmoción interna” en siete provincias donde se focalizaron las protestas con bloqueos de vías, las cuales terminaron el miércoles.
Fuente: NA