El colombiano finalizará su contrato con River Plate el 31 de diciembre y su destino ya está sellado con el Cruz Azul.
Terminó la novela, ya no habrá morbo en esta historia que duró poco pero encendió polémica y hasta sacó a relucir los sentimientos más profundos de los hinchas de Boca y de River, divididos entre la dificultad para aceptar a un jugador rival y no poder asumir que tras dejar un club recale en el otro, respectivamente.
Con casi todo cerrado y a falta de la firma para jugar en Cruz Azul, Miguel Ángel Borja se bajó del barco xeneize y le puso fin a días en los que fue tendencia absoluta por la magnitud de la noticia y lo que hubiera implicado un cruce de vereda.
Y las razones de por qué terminó así recorren estos últimos días y terminan con un avance decidido de los mexicanos que para el delantero fue imposible de rechazar.
La negociación entre Borja y Cruz Azul se había iniciado con el final del año futbolístico de River, como una alternativa a otras del mercado azteca en el cual le interesaba fichar por la presencia de Colombia en una zona del Mundial próximo que se jugarán en dicho país: uno en el DF y el otro en Guadalajara.
El equipo que picó en punta en ese sentido fue Pumas, que finalmente declinó y se bajó, abriendo la chance de que se den otras ofertas.
Fuente: Olé