Los atrasos en los pagos de préstamos personales y de tarjetas de crédito volvieron a registrar un fuerte aumento en agosto y alcanzaron niveles récord en los últimos años, de acuerdo a datos publicados este viernes por el Banco Central.
El Informe sobre Bancos detalló que la irregularidad de crédito, es decir el porcentaje de préstamos con problemas de impago en el sistema bancario, alcanzó 6,6% del total para el caso del endeudamiento de las familias.
Representa 1 punto porcentual de incremento en relación con julio, cuando ya era récord. El 6,6% de agosto es un número que no tiene antecedentes desde el inicio de la última serie histórica que registra el Banco Central, que arrancó en julio de 2008.
Ni siquiera en los años de pandemia la mora en el pago de préstamos fue tan alta, aunque en esos años el BCRA durante el gobierno de Alberto Fernández limitó la tasa de interés que los bancos pueden cobrar a sus clientes por la refinanciación de saldos de tarjeta. En mayo del año pasado la actual administración dejó sin efecto esa medida y liberó ese límite al costo financiero.
“El ratio de irregularidad del crédito al sector privado alcanzó 3,7% a nivel sistémico en agosto, aumentando 0,5 puntos porcentuales respecto al mes anterior. El indicador de mora de los préstamos a las familias totalizó 6,6%, mientras que para el financiamiento a las empresas se ubicó en 1,4%”, indicó el BCRA.
Ese 3,7% iguala al nivel de mora crediticia que había en diciembre de 2023, tras la devaluación inicial que ejecutó el equipo económico apenas asumido Javier Milei en la Casa Rosada. Este número general, que también toma en consideración a las empresas, registra en los últimos años un pico de 6% en los primero meses de Covid.
Una medición anterior también publicada por el BCRA, que contempla hasta 2003, da cuenta de que en junio de 2005 las líneas de consumo de los bancos habían mostrado un 6,6% de préstamos totales en situación de irregularidad. Durante la crisis de fines de 2001 y los primeros meses de 2002 el atraso de pago de los préstamos al consumo llegó a ser del 25% del total.
En el Gobierno creen que el mayor nivel de atraso en los pagos de deuda en los hogares responde al crecimiento del crédito en los últimos meses, entre préstamos personales para consumo y créditos hipotecarios.
El apretón monetario desde julio luego de que el BCRA dio por finalizadas a las LEFI y comenzó un período de fuerte volatilidad en las tasas de interés del sistema financiero, puso bajo presión la capacidad de pago en la economía.
Las tasas de interés para los préstamos personales están, en promedio, en el 82% anual nominal, un número que es mayor al considerar el costo financiero total. Implica una leve suba respecto a un mes atrás, pero muy por encima del índice de inflación anual esperado para los próximos 12 meses, que para el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Central, es de 21,9%.
Fuente: diario Clarín