En Villa Harding Green conviven desde hace muchos años con una gran laguna de residuos cloacales. Las aguas servidas “brotan” y se acumulan en la esquina de Spilimbergo y Salinas Chicas.
En ocasiones el líquido “corre” hacia calle Indiada y se forma un río.
“Es algo tremendo, una vergüenza. La laguna está afuera de una biblioteca popular y yo que vivo a dos cuadras el olor nauseabundo me llega igual”, describió en Radio Altos Daniel Pérez.
Según plantean las y los vecinos más antiguos del barrio, esa laguna data de hace más de 30 años. “El desborde lo reparan y se vuelve a romper”, advirtió.