Lo advirtió el titular de APYME, Julián Moreno. Mañana marcharán al Senado en rechazo al régimen de incentivo a las grandes inversiones.
Hoy el Senado retoma el tratamiento en el plenario de comisiones de la Ley Bases y del paquete fiscal, luego del cuarto intermedio definido el pasado jueves.
Uno de los capítulos que está generando mayores rechazos es el del RIGI, Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones. Y uno de los sectores que viene planteando la necesidad de que las y los senadores no aprueben el nuevo régimen que impulsa el gobierno de Javier Milei es el de las pequeñas y medianas empresas.
Mañana desde las 11h harán una movilización hacia el Congreso para visibilizar su rechazo no solo al RIGI sino a diversos puntos incluidos en la Ley Bases.
“Estamos muy preocupados por lo que se está debatiendo en el Senado; entendemos que en esta ley se define nuestro futuro, se condena a toda la población al subdesarrollo por mucho tiempo”, alertó el titular a nivel nacional de APYME (Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios), Julián Moreno.
Remarcó que el sector pyme “viene de mal en peor” y que el RIGI será, si se aprueba, un durísimo golpe para las pymes porque se abrirá una frontera al capital extranjero sin límites. “Es una vergüenza, una pérdida de soberanía, la entrega de recursos que creímos que era un bien que teníamos que celebrar como el litio, el petróleo, el gas, el agro”, cuestionó.
“Ahora abrimos las fronteras para que salgan todos esos recursos del país y que no les quede nada de nada a los argentinos. Ese es el famoso RIGI. Tenemos que hacer lo posible para que esto se rechace. Si se aprueba el RIGI se decretará el subdesarrollo del país por mucho tiempo”, alertó.
No dudó en afirmar que si se aprueban la ley Bases y el paquete fiscal que propone el gobierno de Milei, las pymes irán a la quiebra.
Sobre el RIGI insistió en que se trata de una brutal entrega de soberanía: “Tenemos recursos disponibles que son apreciados en todo el mundo como las reservas de litio, el petróleo y el gas, sumado a un campo que genera alimentos para 400 millones de personas, zonas de sol y viento para energías renovables y agua dulce. Todo será reiterado por un caño o por un puerto para el desarrollo de otros países”.
Por eso, planteó que de aprobarse el RIGI se hará entrega de soberanía de una manera “descomunal” y ese es motivo suficiente, recalcó, para que toda la ciudadanía lo rechace. “Detrás está el desarrollo de nuestro pueblo y está jugado nuestro pueblo”, se lamentó.
El RIGI, explicó, desprotege a las industrias nacionales, en particular a las pymes, porque no podrán competir con los grandes inversores extranjeros que podrán importar todo, desde bienes de capital hasta el más mínimo insumo, y eso sin ningún límite. Los beneficios, según plantea la ley, se extenderán por 30 años.