Bajó el consumo en supermercados y cambió el hábito de los consumidores

Los supermercados también han registrado una baja en las ventas producto de la caída del consumo interno por la pérdida del poder adquisitivo de gran parte de la ciudadanía argentina.

Fernando Heredia, gerente de Compras de la Cooperativa Obrera, explicó esta mañana en Radio Altos que ante los aumentos de precios y la caída del poder adquisitivo, se generó un cambio en el consumo. La y el cliente se ha vuelto más inteligente, describió, porque analiza cada vez más los productos en góndola, desde el precio y el gramaje hasta quién lo elaboró.

“Muchos consumidores han cambiado de marcas. Ahora buscan una marca B”, precisó sobre la elección de segundas y hasta terceras marcas en distintos productos.

Sí afirmó que hubo una baja importante en la cantidad de unidades vendidas de bebidas, en particular gaseosas y cervezas; al no tratarse de productos indispensables de la canasta básica, la y el consumidor reservan ese gasto “para un gusto”.

En los rubros almacén y comestibles indicó que “viene pasando y muy fuerte” el cambio de hábito en la forma de comprar. “Hay productos que la gente consumía y ahora lo deja para un gusto y en otros enfoca su consumo en lo básico”, agregó.

Sobre el segmento carnes, si bien manifestó que hubo una baja, aclaró que es un rubro que se recupera rápidamente porque todavía en Argentina la carne “sigue siendo un producto bastante rendidor” para las familias.

“El consumidor se está haciendo más inteligente; antes la gente no estaba mucho tiempo en la góndola. Ahora se paran frente a una góndola, se fijan si hay ofertas, miran el gramaje, quién lo produce. Empiezan a hacer rendir el sueldo y es más inteligente porque lee mejor la góndola, está más atento al precio por kilo”, detalló.

Y aseveró que “la necesidad lleva al consumidor a ser más ingenioso en la compra de productos”.

Al ser consultado sobre aumentos de precios, señaló que hasta febrero recibían incrementos constantes y que eso provocó que no se vendiera la cantidad de productos que “la industria pensaba”. Ante este panorama, estimó que podría registrarse “un poco más de estabilidad de precios en marzo”. “La gente no compra y tienen que bajar los precios; hay más competencia entre proveedores”, planteó, por último.