La consultora Zuban Córdoba que realiza investigaciones de opinión pública y de comunicación política dio a conocer días atrás los resultados de una nueva encuesta que revela una caída en la imagen positiva del presidente Javier Milei y de su gestión.
Gustavo Córdoba, director de la consultora, afirmó esta mañana en diálogo con Radio Altos que se trata de un proceso que viene gestándose desde hace un par de meses: “La gente a la que nosotros le preguntamos de manera mensual si llega o no llega y cómo a fin de mes, pasó de un 32% a un 45% la que responde que no llega”.
Ese dato, enfatizó prendió una alarma y empezó a generar una variación significativa de la imagen del presidente. Señaló que empezó a caer entre un punto y un punto y medio por mes tanto la imagen positiva de Milei, como la aprobación de su gestión y la percepción de que el país marcha de la manera correcta.
“Más allá de porcentajes y de encuestas, lo que está de alguna manera puesta en duda es la idea del consenso sobre el ajuste del gobierno”, opinó.
Y como ejemplo mencionó “el apagón televisivo” que se registro el domingo 15 de septiembre cuando Milei presentó en el Congreso el Presupuesto 2025 y bajó considerablemente el rating. “Iba a anunciar más ajuste y la sociedad en lugar de recibir el mensaje del Presidente, le mandó un mensaje con ese apagón televisivo”, insistió.
Agregó que el denominado “núcleo duro” de la sociedad que apoyaba a Milei y sus ideas era de alrededor de 40% al momento de asumir la presidencia y hoy se encuentra en 20%.
“Y ese 20% dice, mirá, ya van nueve meses, no llego a fin de mes, cambié del colegio de los chicos, no como lo que comía antes, no llego a pagar las facturas de luz, de gas, etcétera, la inflación me está comiendo, tres meses atrás con mil dólares quizás una pequeña pyme pagaba tres sueldos, hoy no paga uno. Ahí hay un punto central que es el desgaste a partir de los malos resultados de la economía”, reflexionó.
Córdoba subrayó que a ese dato el gobierno no le prestó atención amparándose en la idea de que el apoyo de la sociedad argentina al plan de ajuste iba a ser eterno. Pero consideró que hay elementos para pensar que el tono, el estilo, la agresividad y todo lo que caracteriza al mandato presidencial del líder libertario, “ya no cae tan bien como antes”.
“Tenemos una acumulación de frustraciones económicas como sociedad por eso es absolutamente lógico que tengamos una baja tolerancia a la espera de los resultados”, señaló.
Al ser consultado sobre la cena que encabezó el presidente en la Quinta de Olivos para “homenajear a los 87 héroes” que votaron a favor del veto a la ley de movilidad jubilatoria, dijo que esa situación “no le cayó nada bien a la opinión pública”.
“Posiblemente la foto de esa cena, de ese festejo, haya sido la gota que rebalsó el vaso porque el gobierno se desgastó también por la sospechosa actitud de cinco diputados del radicalismo que habían votado de una manera y después votaron de otra”, consideró y agregó que la foto de esa cena “rompió el dique de contención a ciertos apoyos”.
De cara a qué puede ocurrir en los próximos meses, manifestó que dependerá de la capacidad de lectura y de reacción que muestre el gobierno, aunque admitió que las expectativas bajan frente a un presidente que en lugar de retroceder y reflexionar, “tira nafta arriba del fuego”.
“La economía es y será determinante. Si el gobierno no logra para octubre del año próximo una mejora en el poder adquisitivo de los argentinos, va a tener un señal electoral muy complicada. Ahora, si el gobierno, por el contrario, armoniza la economía, la deja más o menos con potencialidad de ser prolija y de ponerse en disposición para crecer, puede tener un escenario como el que tuvo Macri en 2017 cuando recibió un premio con un voto de apoyo muy importante sacando casi 21 puntos”, recordó.
Principal hincapié hizo en “la crueldad” del ajuste y, en particular, del modo de gestión de Milei: “Creo que hubo mucha gente que lo votó que dijo, voy a estar del lado correcto, y ahora está descubriendo que no está del lado correcto. Esa crueldad del presidente es como que se te ríe en la cara diciéndote, ´yo te lo dije´”.