Juan Cruz Lissarrague afirmó que los dos dirigentes del PRO “se metieron” en la elección interna del radicalismo.
“Nos quisieron pintar el comité de amarillo y lo llenamos de radicalismo”, expuso en su cuenta de Twitter Juan Cruz Lissarrague, presidente de la Juventud Radical, luego de las elecciones partidarias del pasado domingo. Y esa frase no dejó de llamar la atención.
Esta mañana en diálogo con Radio Altos admitió que dirigentes del PRO “se metieron” en la interna de la UCR y los identificó con nombre y apellido: Nidia Moirano y Santiago Nardelli.
“Vimos a lo largo de las elecciones que Moirano y Nardelli se movilizaron y trabajaron para la segunda lista, la de Fernando Roig, Gisela Caputo y Emiliano Álvarez Porte. No es una opinión, sino un dato de la realidad”, afirmó.
Remarcó que una de las reglas es que los partidos que integran la coalición Juntos por el Cambio no se involucren en las elecciones partidarias. “Si un partido o algunos referentes se meten para discutir una elección interna están violando la regla. Hubo intenciones de que nuestra lista salga perdedora para controlar las decisiones y el trabajo del partido”, acusó.
En ese sentido, admitió que les dolió y molestó la actitud que adoptaron Moirano y Nardelli y no dudó en asegurar que “quisieron dar vuelta una elección” y trabajaron para que la lista que encabezó Pablo Daguerre no se impusiera en los comicios como sí terminó ocurriendo.
Sobre cómo apoyaron a la lista que lideró Roig, mencionó que Moirano y Nardelli utilizaron el padrón radical y “puntearon” para atraer el voto de las y los radicales.
“Enhorabuena el radical se dio cuenta, por eso ganamos en toda Bahía Blanca, en todas las mesas. No pudo esa lista (en referencia a la nómina de Roig, Caputo y Álvarez Porte) ganar en ninguna mesa de la ciudad”, subrayó.
Lissarrague aclaró que no “todo el PRO” se involucró en la interna radical, sino que hubo muchas y muchos dirigentes que observaron el desarrollo de los comicios desde “un costado” y acompañaron a las y los candidatos de las tres listas.
“Pero hubo quienes pensaron que podían hacer algo para decidir por sobre los radicales”, insistió en sus críticas a Moirano y Nardelli.
En cuanto a los resultados de las elecciones, destacó el triunfo de la lista 123 y planteó que se estaba decidiendo qué radicalismo se quiere para los próximos años, incluido qué candidatas y candidatos presentará el partido en las elecciones de 2023. Agregó que los comicios internos eran importantes para poder presentar una opción seria y responsable, para seguir fortaleciendo al partido en el ámbito local dejando los intereses personales y haciendo hincapié en los interés colectivos de las y los radicales, y para poder tener el próximo año “candidatos propios”.
Ratificó que la UCR seguirá siendo parte de la alianza Juntos por el Cambio y que el adversario electoral es el kirchnerismo. “Respetando las distintas miradas y pretensiones encaramos este desafío de seguir conduciendo al radicalismo, siempre dentro de Juntos pero con independencia”, recalcó.
Y completó: “Entendemos que Juntos es más que una elección interna del partido, más que malas decisiones de algunos referentes. El año que viene le queremos ganar al kirchnerismo”.