El presidente electo deslizó que su gobierno no intervendrá para solucionar la problemática que afecta a 100 mil familias.
El presidente electo Javier Milei prácticamente descartó que su gobierno intervenga para solucionar el problema de los créditos UVA. “Si yo decido tener una vida temeraria y, como consecuencia de ello, tengo una lesión, ¿le parece correcto que les pase las cuentas a ustedes?”, comparó con la decisión de tomar los préstamos que unas 100 mil familias adoptaron durante la gestión de Mauricio Macri con el sueño de tener la casa propia.
“El presidente electo refleja la concepción prevaleciente en todos estos años porque básicamente más allá de los discursos se ha demostrado que la actitud de los gobiernos sucesivos es tratar el tema como un problema entre privados. Milei fue explícito diciendo que la gente asumió un riesgo y que se tiene que hacer cargo si no hubiera tomado otro tipo de crédito con tasas más altas”, planteó esta mañana en Radio Altos el economista Alexis Dritsos que asesora al grupo de Hipotecados UVA.
Consideró que Milei omite en sus afirmaciones que hubo una política de Estado donde se promovió a los créditos, donde se hizo hincapié en que se lucharía contra la inflación y se afirmaba que los créditos jamás superarían el 25% en la relación entre las cuotas y el ingreso de los tomadores.
“Acá entra en juego un tema distinto porque antes al menos se discutía de que el Estado busque la forma de compensar esta distorsión entre la evolución de los salarios y la evolución de las cuotas producto de la inflación; ahora con la nueva filosofía económica detrás del presidente electo se descarta cualquier intervención, mediación o moderación que pudiera hacer el Estado”, aseveró.
Dritsos recalcó que las y los hipotecados UVA nunca le pidieron al Estado que “ponga dinero” sino que le vienen solicitando que busque una alternativa para moderar el índice de actualización de los créditos que es por inflación y las tasas de interés para mantener el equilibrio original.
Según informó, son alrededor de 100 mil familias las que tomaron créditos hipotecarios y de ese total el 70% está en bancos oficiales: Nación, Provincia y Ciudad. Por eso, consideró que el Estado tiene herramientas para plantearles a los bancos “la idea del esfuerzo compartido” en busca de una solución.
“La situación es crítica en muchos casos y puede ser un problema adicional a la crisis económica. Sería bueno atenuarla”, sostuvo y admitió que no tienen mucho optimismo de que cambie la situación tras la asunción de Milei.