La ola de calor supuso que las aguas del Titicaca perdieran 54 centímetros de altura desde abril hasta ahora, lo que supone un retroceso.
La Asociación de Pueblos Originarios Conservacionistas (APOC) exigió que se declare la emergencia en el lago Titicaca, que se extiende entre la frontera de Perú y Bolivia, debido al estrés hídrico que viene sufriendo en los últimos tiempos.
Los integrantes de APOC se reunieron el martes en Puno, Perú, donde acordaron demandar esta medida a las autoridades.
“Necesitamos que el lago Titicaca sea declarado en emergencia, que de una vez intervenga el Estado. Necesitamos acciones inmediatas”, reclamó el presidente de la organización, Edgar Cahui Cahue, en declaraciones recogidas por La República.
El dirigente precisó que además del descenso de las aguas, el lago también se vio afectado por la quema de totorales, una planta herbácea perenne acuática típica de la zona y que representa un papel clave en la purificación del agua.
“La Reserva Nacional del Titicaca es medular para Puno porque alberga gran cantidad de biodiversidad y actualmente se encuentra en una acelerada degradación. No solo se trata de contaminación, sino de muchos otros problemas”, señaló Cahui.
El dirigente, en declaraciones a Pachamama Radio, también destacó que los totorales están en un 95 % secos, por lo que criticó algunos informes de monitoreo que afirman que el estado del lago es aceptable.
Para el activista, esta afirmación errónea provoca que no se asigne el presupuesto necesario para abordar la situación.
Hace menos de una semana se difundieron impactantes imágenes de esta conocida maravilla natural, desde Puno, que alertaban del árido estado del lago.
La ola de calor supuso que las aguas del Titicaca perdieran 54 centímetros de altura desde abril hasta ahora, lo que supone un retroceso de hasta dos kilómetros en algunas de sus orillas.
Fuente: NA