Lucas Beier se refirió a la imputación contra los trabajadores que llevan 14 años de lucha contra la contaminación del estuario de Bahía Blanca.
En medio de una larga batalla legal, los Pescadores Artesanales de Ingeniero White continúan exigiendo medidas concretas para enfrentar la contaminación ambiental que afecta el estuario.
Lucas Beier, abogado de los pescadores, reclamó en Frente a Cano por la falta de acción por parte de las autoridades judiciales y fiscales, “a pesar de las pruebas existentes y de la legislación vigente”.
“La ironía es que en una causa que lleva 12 años de investigación ,tanto el fiscal como la jueza, consideren que no hay pruebas para llamar a declarar a los directores de las empresas, a pesar de las pruebas, las pericias que ya dicen quién contaminó el estuario, y a la vigencia de una ley en tal sentido. Y pese a todo eso no hay avances de la causa. a Cámara Federal en cuatro oportunidades les advirtió que debían avanzar y en el marco de eso los pescadores salieron a reclamar para que la causa avance, y a ellos sí lo citaron porque cortaron una calle por una protesta. Hace cinco años que la causa está paralizada”, afirmó Beier.
Además de la falta de avances en la causa, los pescadores enfrentan ahora consecuencias legales por manifestarse en busca de justicia. Beier explicó: “Le inician una causa penal a ellos por manifestarse porque se vio afectado el normal desarrollo de la producción durante una jornada. Se les imputa cortar la calle, un delito penal. La audiencia estaba fijada para el 12 de julio y la movieron para el 7 de septiembre por cuestiones del juzgado.”
“Si bien es cierto no hay una relación de superioridad en términos de jerarquía en función de la independencia que existe en el sistema, también es muy cierto que la Cámara les hizo un tirón de oreja tanto al fiscal Ulpiano Martínez como a la jueza Marrón”, dijo también el abogado.
El abogado resaltó la falta de atención hacia la problemática ambiental en los discursos públicos y la ausencia de control sobre las empresas contaminantes: “En los hechos nadie habla de medioambiente, de los peligros de las nuevas inversiones. Todos hablan de lo maravilloso que va a ser para la ciudad, pero de lo otro no se habla. Nos sentimos bastante frustrados. Es una causa que llevó mucho tiempo, somos los únicos que venimos reclamando por la contaminación, acá los pescadores tomaron la iniciativa y tienen esta respuesta.”
Beier también hizo hincapié en la falta de mediciones y controles ambientales efectivos: “Hoy no mide nadie. Las mediciones de lo que se tira en la ría es importante porque es una forma de contralor. El problema es que el estuario no admite más que se arroje nada, porque ya está contaminado. Hoy en día tiene una bioacumulación terrible de metales pesados, lo que se debería arrojar tendría que ser 0, pero todas las empresas tienen el permiso de hacerlo. No hay controles, pero cuando se hacían los controles, no había consecuencias”, concluyó el abogado.
La situación denunciada por Lucas Beier evidencia la urgencia de abordar la contaminación ambiental en el estuario y la necesidad de acciones concretas por parte de las autoridades competentes. Mientras los pescadores artesanales continúan luchando por la preservación del medio ambiente y su sustento, la falta de avances en la causa y la impunidad de las empresas contaminantes generan una creciente frustración en la comunidad afectada. Resulta crucial que se tomen medidas inmediatas para garantizar un adecuado control y protección del ecosistema, así como la aplicación efectiva de la ley para responsabilizar a quienes contaminan.