Roxana Heinrich, hija de Enrique, compartió sus reflexiones en Radio Altos sobre el asesinato de su padre.
Se cumplieron 47 años del secuestro y asesinato de los reporteros gráficos de La Nueva Provincia, Enrique Heinrich y Miguel Loyola, quienes fueron víctimas de la dictadura militar en Argentina.
Roxana Heinrich, hija de Enrique, compartió sus reflexiones en Frente a Cano sobre lo ocurrido.
“Ayer fue un día emocionante. Fuimos a la Cueva de Los Leones. Sentí una sensación rara de luego tantos años y tanta injusticia. Ver ese lugar tan profundo, pensaba el cinismo con el que hicieron eso”, expresó Roxana Heinrich.
La historia personal de Roxana está marcada por las amenazas y la clandestinidad. A los 12 años, debido a las amenazas contra su familia, tuvo que dejar Bahía Blanca y mudarse a Saldungaray. Allí permaneció hasta los 15, cuando volvió a nuestra ciudad por tres años.
Durante ese tiempo, no podía revelar su apellido ni su identidad. “Todos los que me encontraban me decían que no diga mi apellido; por la ciudad gris y por el miedo, era sumamente necesario que no lo dijera”, relató.
A los 18 años, Roxana se trasladó a Buenos Aires, y desde entonces nunca había visitado el lugar donde arrojaron los restos de su padre. “Las personas que lo encontraron fueron a tomar mate y los encontraron; quiénes eran es una de las deudas que quedan de la investigación”.
Roxana contó que creció en un entorno donde no se hablaba abiertamente del tema. La falta de información y las explicaciones limitadas llevaron a que la familia evitara abordar el tema. “Mi mamá nos había dicho que nuestro papá había tenido un accidente”.
Con el paso del tiempo, Roxana fue adentrándose en el tema aunque “toda la información que teníamos era escueta y me fui interiorizándome a medida que crecí y tuve mis hijas”, añadió.