El precandidato a presidente del Partido Obrero, Gabriel Solano, sostuvo que la negociación que encabezó el gobierno fue “a favor del sistema financiero”.
Anoche el Ministerio de Economía informó que el canje de deuda alcanzó los $4,34 billones y representó el 64% de los bonos cambiados.
“Es una entrega absoluta a los bancos en los términos de una negociación que fue a favor del sistema financiero; se les da beneficios extraordinarios”, advirtió Gabriel Solano, precandidato a presidente por el Partido Obrero.
En diálogo con Radio Altos se mostró muy crítico con la operatoria que habilitó el gobierno nacional para “despejar” los próximos vencimientos de deuda.
Argumentó para rechazar la medida encabezada por el ministro Sergio Massa, que cualquier trabajador o jubilado cuando se discute su salario o haber, respectivamente, no tiene como beneficio un ajuste por inflación o por devaluación. Por eso, remarcó, desde hace cinco años se viene registrando una caída de los salarios y de las jubilaciones.
En cambio, a los bancos el Ejecutivo nacional les dio la garantía de ajustar sea por inflación o por una futura devaluación.
“El gobierno dice que fue exitosa la operación porque ayer ingresó un 64% al canje. La pregunta es por qué entró ese porcentaje y la respuesta es porque le dieron lo que le pedían. Después de haber negociado las condiciones del acuerdo, los banqueros consiguieron beneficios que son muy claros”,aseveró.
En ese sentido, insistió en que si hay una devaluación o una disparada inflacionaria, los banco “estarán cubiertos”.
“El país está quebrado, tiene una deuda impagable, faltan dólares en la económica; con este panorama más tarde o temprano seguirán renegociando deudas”, concluyó.