El director de Articulación Público-Privada, Germán Baratelli, advirtió sobre los graves problemas edilicios y de seguridad.
El director de Articulación Público-Privada, Germán Baratelli, y la directora del Mercado Municipal, Antonela Giglio, fueron los encargados de explicar en conferencia de prensa cuál es la situación del edificio de Donado 151 y qué proyecta la Municipalidad para ese sector.
El contacto de los funcionarios con los medios de comunicación se dio luego de que las y los comerciantes que los habían increpado en las oficinas de Gestión Urbana se retiraran del lugar tras la llegada de personal policial.
Afirmó que se decidió el cierre provisorio por el grave problema edilicio y de seguridad que presenta el edificio.
Habló de una situación de alta peligrosidad, con riesgo eléctrico, con filtración e ingreso de agua al edificio, con presencia de garrafas y un riesgo de explosion altísimo. “La semana pasada los profesionales de la UTN nos advirtieron sobre lo grave de la situación. Cuando nos dijeron que hay riesgo de explosión y de incendio, decidimos tomar la medida aunque sea dura y difícil”, manifestó.
El funcionario negó que haya una intención de demoler el edificio y remarcó que no se centrarán en los rumores, sino en solucionar el actual problema.
Lo urgente, señaló, es reunirse con cada uno de las y los comerciantes y las ONG que funcionan dentro del Mercado Municipal para analizar qué solución se les da ante el cierre de sus locales.
Además, indicó que deben definir cuánto tiempo llevará poner en condiciones seguras el edificio para que pueda volver a abrir sus puertas.
“No vamos a buscar culpables para atrás, vamos a buscar las soluciones para adelante. Si pasa algo en el Mercado, es una tragedia”, alertó y lo comparó con lo ocurrido en el histórico edificio del Banco Nación que se prendió fuego.
Agregó que hacer futurología respecto a plazos de obra es inoportuno e insistió en que las primeras acciones que realizarán serán reunirse con las y los propietarios de los locales y avanzar en la confección de un informe pormenorizado de cada uno de los trabajos que se requieren.
“El objetivo es volver a contar con un edificio que cumpla con las condiciones. Tenemos que concentrarnos en realizar los trabajos urgentes de reparación y encontrar una solución para los comerciantes. Es una decisión drástica pero hay que tomarla”, concluyó.
Por su parte, Giglio expresó que entiende el enojo de las y los comerciantes y planteó que desde que asumió la gestión advirtió sobre los problemas que presentaba el edificio. “Los informes de la UTN son irrefutables. El peligro y el riesgo de incendio están”, aseveró.