De la mano de un gol de Gonzalo García, el goleador inesperado, Real Madrid se impuso 1-0 ante Juventus gracias a un notorio cambio de actitud en el segundo tiempo.
De esa manera se metió en los cuartos de final del Mundial de Clubes.
Si bien el primer tiempo prometía una mayor paridad gracias a grandes chances de los italianos, el complemento fue un monólogo del equipo de Xabi Alonso, que hizo pesar su jerarquía.
Sometió a la Vecchia Signora y logró el pase a la siguiente fase del certamen bajo la lluvia de Miami.