La casa de moda italiana Prada anunció hoy la compra de su rival, también de origen italiano, Versace, por la suma total de €1.250 millones, el equivalente a US$1.375 millones.
El acuerdo se produce luego de que en marzo Donatella Versace, hermana del creador de la marca Gianni Versace, anunciara su renuncia como directora creativa de la marca italiana.
“Nos complace dar la bienvenida a Versace al Grupo Prada y abrir un nuevo capítulo para una marca con la que compartimos un compromiso inquebrantable con la creatividad, el cuidado del producto y una sólida herencia cultural”, afirmó Patrizio Bertelli, presidente y director ejecutivo del Grupo Prada.
Bertelli sostuvo que el objetivo de la adquisición es “seguir manteniendo el legado de Versace, celebrando y reinterpretando su estética atrevida y atemporal”.
Añadió, además, que proporcionará una “plataforma sólida, reforzada por años de inversiones continuas y arraigada en relaciones duraderas”.
“Versace mantendrá su ADN creativo y su autenticidad cultural, beneficiándose al mismo tiempo de la fortaleza de la plataforma del grupo, incluidos los conocimientos industriales y la experiencia desarrollada en procesos minoristas y operativos”, explicó Prada en un comunicado.
La presidenta ejecutiva de la marca italiana, Andrea Guerra subrayó que ser dueño de Versace, con sus “atrevidos estampados de estilo barroco”, traerá beneficios, ya que “aportará nuevos clientes a Prada, que es conocida por su estilo minimalista”.
Previo a esta inquisición, la empresa multinacional de moda de lujo Capri Holdings Limited había pagado US$2.100 millones en el año 2018 por la adquisición de Versace, que anteriormente había sido propiedad en un 80% por la familia Versace y en un 20% del fondo de inversión estadounidense BlackRock.
Fuente: Noticias Argentinas