El objetivo es identificar a las personas “impulsoras de agendas enemigas de la libertad” y echarlas.
Después de que Javier Milei echara a Diana Mondino, la Casa Rosada comunicó que pondrá en marcha una auditoría a la Cancillería para “identificar impulsores de agendas enemigas de la libertad”. Mondino fue despedida de su función después de que la Argentina, como hace siempre, votara en la ONU a favor de levantar el embargo que Estados Unidos tiene sobre Cuba.
“La Argentina atraviesa un período de cambios profundos y esta nueva etapa exige que nuestro cuerpo diplomático refleje en cada decisión los valores de la libertad, soberanía y derechos individuales que caracterizan a las democracias occidentales”, afirmó el Gobierno a través de un comunicado difundido este miércoles.
En la misma línea, desde el Ejecutivo remarcaron que “nuestro país se opone categóricamente a la dictadura cubana, y se mantendrá firme en la promoción de una política exterior que condene a todos los regímenes que perpetúan la violación de los derechos humanos y las libertades individuales”.