La Dra. en Química e investigadora del Conicet, Valeria Eldesztein, advirtió sobre el ataque del gobierno a la ciencia y a la tecnología.
El próximo fin de semana impulsado por trabajadores y trabajadoras de la ciencia y de la educación se desarrollará el primer festival en defensa de la ciencia y de la tecnología en más de 50 ciudades de todo el país.
Bahía Blanca será uno de los nodos de “Elijo crecer, ciencia por Argentina”. La actividad está programada para el sábado 6 de abril de 17 a 19h en el Anfiteatro Ezequiel Martínez Estrada a orillas del Arroyo Napostá.
Valeria Edelsztein, Doctora en Química, docente e investigadora adjunta del CONICET, es una de las científicas que está al frente de la iniciativa y esta mañana en diálogo con Radio Altos se refirió a la compleja situación que atraviesa el sistema científico tecnológico argentino y a la necesidad de defenderlos.
“Estamos atravesando una situación crítica con el presupuesto de 2023 prorrogado, con una ciencia que está prácticamente paralizada, con muchísimos despidos de personas claves que sostienen al sistema. Frente a esta situación y a la caída de becas financiadas, al cierre de líneas de investigación y a la muy probable fuga de cerebros que ya vivimos y que no queremos que vuelva a ocurrir, pensamos en este festival”, explicó.
Agregó que el objetivo es que tanto sábado como domingo en cada una de las localidades donde se replicará el festival, además de acercar la ciencia a la sociedad, se lleve adelante una acción de lucha y de defensa de la ciencia y de la tecnología.
Las tres consignas de la propuesta son: en contra del desmantelamiento del sistema científico tecnológico, por el cumplimiento de la ley de financiamiento de ciencia y tecnología aprobada por unanimidad en el Congreso y en contra de los despidos arbitrarios en el Estado.
“Hay que defender a nuestra ciencia y a nuestra tecnología, son nuestro orgullo nacional, no podemos perderlas”, remarcó.
Admitió que “comunicar ciencia” es difícil y más complejo aún contrarrestar los discursos anticientíficos, e insistió en varias ocasiones en que “la ciencia que hacemos es por el pueblo, para el pueblo y del pueblo”.
Asimismo, advirtió que el sistema científico tecnológico está prácticamente paralizado con partidas presupuestarias que no se pueden ejecutar, con falta de personal porque hubo muchos despidos, con líneas de trabajo con riesgo de cierre y con universidades nacionales que podrían también cerrar “por el ahogo presupuestario”.
“El ataque sistemático a la ciencia y a la tecnología empezó en el gobierno de Macri y continuó ahora en el gobierno de Milei. Está fomentado desde el gobierno y si no se revierte es difícil pedirle a la gente que no piense que en el Conicet somos todos ñoquis”, planteó.